Seguro que en algún momento de tu vida, o en muchos, te encontrarás con una moza aragonesa que se ajuste a tus estándares de belleza. Será de esbelta figura o gorda como un tonel, de pechotes grandes o pequeños o redondicos y finos como melocotones de Calanda, de culazo enorme o culico respingón y carita de princesa de cuento o actriz porno que te cautivará como ninguna. ¡Querrás volver a verla cuanto antes!
Si eres afortunado/a y consigues encontrarla en alguna red social o te da su número de teléfono el problema vendrá cuando te ponga excusas de lo más variopinto para no quedar, pues es una de las grandes virtudes aragonesas. Por supuesto, si conoces a un mozo desganao de los que se conforman con el buen comer ocurrirá algo parecido, o eso dicen.
Según un estudio realizado durante los últimos años, por experiencias propias y ajenas, las aragonesas de buen ver no pueden quedar ni hoy, ni mañana, ni dentro de una semana, ni al cabo de dos o tres o cuatro por los motivos que se relatan en este álbum elaborado con la intención de que quienes proponen quedar pillen las indirectas cuando les mandan a la mierda y quienes no quieren quedar tengan una enciclopedia a mano para hacer lo propio con las mozas o los mozos ansiosos de conocerlas o follárselas a toda costa.
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IMPORTANTE: esta recopilación la publiqué entre 2015 y 2017 reuniendo excusas COMPLETAMENTE VERÍDICAS que quedaron registradas en mis conversaciones a través de redes sociales entre 2012 y 2017, por lo que hay que entender el contexto de la época y probablemente hoy pueda ofender a mentes subdesarrolladas. Si te ofende algo piensa por qué, quizás tú o tu amiga haya puesto alguna de estas excusas para no quedar o te cueste entender que todas sean ciertas. Al menos no pongo quién me dijo cada una.
Esta compilación la mantengo y la comparto con un tono entre humorístico y rabioso, pues a lo largo de mi trayectoria como fotógrafo de eventos han sido cientos las chicas que mientras llevaba la cámara en la mano me han hecho proposiciones indecentes que no podía aceptar en ese preciso instante y hemos acordado quedar “el domingo” para seguir conociéndonos. Lo curioso es que al no especificar de qué semana, de qué mes y de qué año jamás hemos quedado ni a tomar una Fanta.
Esto solamente me ha ocurrido en Aragón, mi tierra, algo todavía más peculiar porque en otras comunidades siempre que me han propuesto vernos otro día nos hemos visto. Y el propósito habrá sido hablar, conocernos más para darnos cuenta de que nos damos puto asco mutuamente, dar un paseo, ir de compras, hacer un book de fotos, jugar al tragabolas o follar como perros en celo, pero lo importante es que hemos quedado.
Por tanto jamás entenderé este hecho con lo fácil que sería no dar un teléfono de contacto, negarse a decir el perfil de la red social de turno o confesar claramente un “me pones cachonda y nos seguimos conociendo ahora o nunca” para no generar ilusiones. No es una rabieta, es un problema monumental en la vida social de muchos que afecta bastante a la forma de relacionarnos porque llega un punto en el que piensas que no se puede confiar en nadie. Es necesario llamar la atención con esto para que deje de suceder.
Aquí están las primeras 200 excusas para no quedar y no llegué a las 1.001, pero tengo más de 800 en un documento. ¡Eso significa más de 800 aragonesas con nombres y apellidos en apenas 5 años que la noche que las conocí estaban dispuestas a entrar en mi vida y al día siguiente pasaron de mi culo y me mintieron cruelmente! Quizás sea un pringao o simplemente tenga mala suerte con las chicas que me encuentro, pero te aseguro que esto sigue pasando a día de hoy y jode sobremanera.
Ah, y no hice versión de chicos porque tras comentarlo con muchas personas parece que son más simples a la hora de poner excusas y apenas recopilé una docena diferentes. Si quieres colaborar, opinar o te gustaría analizar psicológicamente cada caso en profundidad rellena este formulario de contacto, estaré encantado de ayudarte o aportarte más datos sobre el contexto como he hecho alguna vez para trabajos universitarios.